Si la primera parte me pareció muy interesante, está tampoco ha estado nada mal. Vas con la idea de que no te pueden sorprender otra vez, pero lo hacen. El concepto es el mismo. Los personajes van de menor a mayor credulidad ante los fenómenos extraños que se acontecen, hasta que llegamos a una vorágine de sucesos que no dejan lugar a una explicación racional. Tanto ésta como la anterior, consiguen que no despegues los ojos de la pantalla. Más todavía, si cabe, en esta segunda parte ya que ahora la acción se muestra a través de unas cámaras fijas de vigilancia. Este hecho hace que busques con inquietud a cada instante por todo el plano qué es lo que ha se ha movido, o lo que está fuera de lugar. Siempre intentando anticiparte al susto, que también van de menos a más. Llegando a ésos de los que te ries por haber saltado en la butaca.
Mención especial merecen los asientos vibratorios de los cines que, en este caso, te proporcionan una mayor implicación en la película y que consiguen meterte dentro de la casa.
No es imprescindible ver la primera parte antes, pero sí que es muy recomendable ya que hay varios puntos claves que tienen relación con la anterior.
No es imprescindible ver la primera parte antes, pero sí que es muy recomendable ya que hay varios puntos claves que tienen relación con la anterior.
Calificación: Buena
No hay comentarios:
Publicar un comentario