El Hombre de Acero


Tenía muchas ganas de ver al nuevo Superman, a pesar de no ser uno de mis superhéroes preferidos, después del decepcionante relanzamiento por parte de Bryan Singer hace unos años. Parecía que este Superman tendria más acción y una historia de mayor peso, pero tampoco es para tanto ya que la sombra de Batman es alargada. Nos cuentan su origen, otra vez, mediante flashbacks bien entrelazados que son los que impiden que la primera hora y media se haga pesada, mientras esperamos la gran traca de acción. Esta llega en los últimos 45 minutos, que son de acción constante y destrucciones por doquier, haciendo las delicias de los fans. Este Superman nos lo presentan como un redentor, un ser de otro mundo que sacrifica su vida por el bien de la humanidad con unas muy evidentes alusiones bíblicas (principalmente en una escena).

En líneas generales está bien porque Superman siempre es Superman y las escenas de acción gozan de grandes efectos especiales, pero la sensación que te queda tras verla es que había demasiada expectación.

Calificación: No es para tanto pero está bien

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