Dario Argento es uno de esos iconos del cine de terror que no se explica muy bien cómo se le tiene tanto aprecio, ya que si uno ve las pelis que le han hecho famoso en el giallo, se dará cuentas que todas son igual de cutres. Con el paso del tiempo eso no ha cambiado, porque esta versión de Drácula sigue la estela de sus antiguas películas, sólo que con algo más de medios que dan mejores muertes sangrientas en pantalla.
Dejando claro que la peli parece que está rodada a machete y algunos detalles algo absurdos de la misma, la peli llega a entretener sino te la tomas a coña.
Calificación: En el alambre de la cutrez
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