Había ganas de hincarle el diente a la nueva de los X-Men, y es que nos ponían los dientes largos con la trama de los centinelas. La peli no está mal, pero en su ya sexta película de la saga, esperaba que se centraran más en la acción y dejarse de tantas vueltas. Arranca con fuerza, con una batalla y despliegue de poderes muy buena. Sin embargo, hasta casi el final no tendremos más dosis continuada de poderes mutantes.
Los momentos de Pietro (Quicksilver) en escena son muy buenos y nos permite intuir qué podemos esperar de sus aparición en Los Vengadores (aunque sean estudios distintos los que gestionan ambas franquicias).
Calificación: Los mutantes siempre molan
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