Alex Garland siempre nos da cosas potentes, y parece que este año se ha centrado en el género bélico. En esta ocasión nos narra un suceso real, una situación de guerra urbana de supervivencia en un entorno muy hostil. La primera parte sirve para gestar la tensión y la peligrosidad de la zona en la que se encuentran para luego convertirse en una explosión de violencia cruda y angustiosa que busca reflejar una situación de combate que se percibe muy realista. No es una gran hazaña, ni ninguna misión, es simplemente la cruda realidad del combate militar muy bien expuesta por Garland.
Calificación: Está bien
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