Cuando conocí la noticia de una segunda parte me alegré bastante porque la primera me había gustado mucho. Sin embargo, la posterior noticia de que iba a ser un musical me echó para atrás. Mucho tiempo después vino el trailer y volví a recuperar las ganas para volver a perderlas con las malas críticas. Con todo este vaivén de sensaciones me planté en el cine para forjar mi propia opinión como habitualmente. Y lo que me encontré es una peli igualmente triste y dramática que la anterior pero sin la misma consistencia. Los momentos musicales, como reflejo de la evasión del personaje no están mal pero me sacan del tono de la misma, dejando un regusto final de desagrado.
Calificación: Se ve pero no es lo mismo
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