El hype estaba a medio gas ya que The Purge había sido un fiasco, y asesinos que irrumpen en una casa con máscaras.....¿no he visto ya esto antes?. Hay que decir que el planteamiento es mucho más simple y directo. Somos desconocidos y vamos a matar a lo bestia. La peli no es más que una sucesión de muertes brutas (puntazo a favor) y escenas entre medias con diálogos insustanciales que sirven para explicar el por qué de las cosas de forma rápida y cutre, para seguir dando paso a la escabechina. De hecho, los momentos en los que no hay sangre son de lo más chorras. No vayas al cine buscando otra cosa que no sea violencia gratuita porque no la vas a encontrar. Eso sí, me entretuvo y disfruté con la sangre derramada. Especialmente ¡¡OJO mini-spoiler!! con la escena de la batidora. Fue clavarla en la cabeza y, por dentro todos gritábamos: "¡¡Enchúfala, enchúfala!!".....momentazo.
Calificación: Entretenimiento sanguinario
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